YARUQUI Y CINCO MINUTOS DE TERROR

Por: Cristian Ortiz

Salto inicial del encuentro entre Calderón (rojo y azul) vs Yaruquí (blancos). Categoría masculina. Foto: Cristian Ortiz/Oh Currantes.

La otra semifinal que recibió el coliseo de Nayón fue el duelo entre Calderón y Yaruquí en categoría masculina. El duelo tenía muy altas expectativas, pues al verlos calentar se podía reconocer su buen juego. Desde antes del inicio del partido, el ambiente se llenó de emoción, pues Yaruqui trajo su banda de pueblo, la que animó a toda la gente asistente mediante sus sonatas.

Propios y extraños querían ver este extraordinario encuentro. El partido empezó muy duro, pues al primer minuto, gracias un bloqueo fuerte, un jugador se estrelló contra el piso, teniendo que realizarse un cambio. El encuentro fue muy igualado, pues los puntos iban y venían y el marcador no se movía del empate.

Con el paso del tiempo Calderón mostró su casta y, con varias jugadas, logró sacarle una diferencia de ocho puntos a su rival. Sin embargo, Yaruquí logró acortar la diferencia, terminando abajo por solo tres puntos al finalizar el tercer periodo del encuentro.

Jugador de Calderón-calentamiento. Foto: Cristian Ortiz/Oh Currantes

Ya en el último periodo, Calderón volvió a sacar su casta y logró aventajarse por diez puntos. Faltando seis minutos para el final, Yaruqui bajo su nivel considerablemente, el cansancio físico y anímico comenzaron a hacer mella en los jugadores. Esta situación fue aprovecha por Calderón y, a cinco minutos del silbatazo final, consiguió lograr una ventaja sorprendente para lo que había sido el encuentro, pues en ese lapsus logró enterrar a su rival con un marcador final de 75 a 48. En la final, Calderón se medirá ante Pomasqui, quien logró superar a Pintag con un marcador de 36 a 30 en el coliseo de Tumbaco.